¡Vamos a hacer un flan de café que va a ser la envidia de cualquier sobremesa!
Receta de Flan de café
Ingredientes que necesitas (y que seguro ya tienes en casa):
- 500 ml de leche (¡porque el flan sin leche no es flan!)
- 4 huevos (los responsables de esa textura mágica)
- 100 g de azúcar (porque la vida es más dulce con azúcar)
- 1 taza de café bien fuerte o espresso (el protagonista de esta historia)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla (opcional, pero le da un toque pro)
- 100 g de azúcar extra para hacer el caramelo (ese toquecito dorado que todos amamos)
Pasos para preparar este flanazo de café:
1. Caramelo: ese toque que enamora a todos
Vamos a empezar con lo más divertido: ¡el caramelo! Pon los 100 g de azúcar en una sartén a fuego medio. Ten paciencia, no revuelvas, deja que el azúcar se derrita lentamente. Una vez que empiece a tomar un color ámbar, muévelo un poquito para que no se queme. ¡Ojo! El caramelo es sensible, así que no te distraigas. Cuando ya lo tengas con ese color doradito perfecto, viértelo en el molde donde harás el flan. Gira el molde para cubrir el fondo con el caramelo. ¡Listo! Reserva mientras seguimos con la magia.
2. El batido del flan (sin sudar, es súper fácil)
En un bowl, bate los huevos y el azúcar juntos, como si estuvieras haciendo la mejor mezcla de tu vida (no necesitas batidora, ¡a mano va perfecto!). Luego, agrega la leche y la taza de café bien fuerte. Si te gusta la vainilla, este es el momento para añadirla. Mezcla todo bien hasta que veas que se ha unido en una sola y deliciosa mezcla líquida.
3. Vertido y horno: lo emocionante está por venir
Ahora viene lo sencillo: vierte esa mezcla de café flanero sobre el caramelo que hiciste antes. No te asustes si el caramelo se endureció, ¡es normal! En el horno, se derretirá y quedará increíble.
Coloca el molde en una bandeja con agua caliente (sí, vamos a hacer un baño maría) y mételo al horno precalentado a 180°C. Deja que el flan se cocine ahí durante unos 50-60 minutos, o hasta que veas que está firme pero con un movimiento sutil al centro (como un flan debería ser).
4. El momento de la verdad: enfriado y desmolde
Cuando el flan esté listo, sácalo del horno y déjalo enfriar a temperatura ambiente. Luego, mételo a la nevera por unas horas (o mejor toda la noche, si tienes paciencia). Para desmoldarlo, pasa un cuchillo por los bordes y con un pequeño rezo a los dioses del caramelo, voltéalo sobre un plato. ¡Tarán! Ahí tienes tu flan de café, listo para impresionar a todos.
Un plus para los más atrevidos
Si eres de esos que les gusta dar el toque especial a todo, puedes servir tu flan con un poco de nata montada, chocolate rallado o incluso con unas almendritas tostadas. ¡La creatividad no tiene límites!
Curiosidades del Café
El café es una bebida tan popular que está llena de curiosidades interesantes. Aquí van algunas que seguro te sorprenderán:
→♥El café "viene de una cabra"
La leyenda cuenta que el café fue descubierto por un pastor de Etiopía llamado Kaldi, allá por el siglo IX. Según la historia, Kaldi notó que sus cabras se volvían súper energéticas después de comer unos frutos rojos de un arbusto. Decidió probarlos él mismo, y ¡voilà!, se sintió más despierto que nunca. ¡Y así, las cabras "descubrieron" el café!
→♥El café fue prohibido... varias veces
A lo largo de la historia, el café fue prohibido en diferentes lugares. En el siglo XVI, por ejemplo, los líderes religiosos de La Meca lo consideraron una amenaza para la moral pública. Incluso en Europa, hubo intentos de prohibirlo porque algunos creían que el café fomentaba el debate político y las "reuniones peligrosas". ¡Parece que el café siempre ha sido revolucionario!
→♥Es la segunda bebida más consumida del mundo
Solo el agua supera al café en cuanto a consumo mundial. Con más de 2.000 millones de tazas de café bebidas a diario, es fácil entender por qué hay tantas cafeterías por todas partes.
→♥Un "café instantáneo" tiene casi 250 años
Aunque muchos piensan que el café instantáneo es un invento moderno, el primer intento de hacer café soluble se remonta a 1771 en Gran Bretaña. Sin embargo, no fue hasta principios del siglo XX cuando realmente se popularizó con marcas como Nescafé.
→♥Café en el espacio
Los astronautas de la Estación Espacial Internacional no solo comen comida deshidratada, ¡también disfrutan del café! En 2015, la primera máquina de espresso espacial, llamada "ISSpresso", fue llevada a la estación, permitiendo a los astronautas saborear un buen café.
→♥La cafeína es una defensa natural
El café produce cafeína como un mecanismo de defensa contra insectos. Las altas concentraciones de cafeína en las hojas y los frutos de la planta actúan como un pesticida natural, manteniendo a raya a algunos bichos. ¡Así que, además de despertarnos, el café también se protege a sí mismo!
→♥¿Café descafeinado? No del todo
Aunque el café descafeinado tiene mucha menos cafeína, no está completamente libre de ella. En realidad, una taza de café descafeinado puede tener entre un 1% y un 3% de la cafeína de una taza normal.
→♥El país más cafetero no es el que crees
Aunque muchos piensan en Colombia o Brasil como los mayores consumidores de café, en realidad es Finlandia el país que más café consume por persona. Un finlandés promedio bebe alrededor de 12 kg de café al año. ¡Esos inviernos largos necesitan mucho café!
→♥El café más caro del mundo pasa por... un animal
El kopi luwak es uno de los cafés más caros y curiosos del mundo. Proviene de granos de café que han sido ingeridos y luego expulsados por un animal llamado civeta (un tipo de mamífero). Estos granos pasan por un proceso de fermentación en el estómago del animal, lo que supuestamente mejora el sabor del café. Aunque, admitámoslo, la idea puede sonar un poco rara.
→♥Café y longevidad
¡Buenas noticias para los cafeteros! Algunos estudios han sugerido que el café podría ayudar a aumentar la longevidad y reducir el riesgo de varias enfermedades, incluidas las cardíacas y el Parkinson. Así que, la próxima vez que tomes tu taza, ¡piensa que también estás brindando por tu salud!
Y ahí lo tienes, ¡el flan de café que cambiará tus postres para siempre! ¿A que suena fácil? Pues lo es, y lo mejor de todo es que sabe incluso mejor de lo que imaginas. Así que, ¿a qué esperas? ¡Corre a la cocina, prepara tu café, y haz este flanazo!
Si te ha gustado esta receta, no dudes en dejarme un comentario y contarme cómo te ha quedado. ¡Nos vemos en el próximo post con más ideas deliciosas para conquistar la cocina!
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